En busca de la santidad

Papa Francisco: Hay que tener en cuenta que la santidad no es algo que nos proporcionamos a nosotros mismos, que obtenemos con nuestras cualidades y nuestras habilidades. La santidad es un don, es el regalo que nos hace el Señor Jesús, cuando nos lleva con Él, nos cubre de Él y nos hace como Él... La santidad es el rostro más bello de la Iglesia: es descubrirse en comunión con Dios, en la plenitud de su vida y su amor... no es la prerrogativa de unos pocos: la santidad es un don que se ofrece a todos, sin excepción, por eso es el carácter distintivo de cada cristiano.

miércoles, 15 de abril de 2015

LA PRIMACÍA DE LA GRACIA Y LA FECUNDIDAD EVANGELIZADORA


Querido amigo, te encontrarás con algunas personas  –incluso sacerdotes- que te dirá con toda su buena intención que no están de acuerdo del todo con eso de que la oración es lo más importante. Después tratarán de matizar la idea para al final remarcar que lo importante es la formación para la acción, para que “seamos creíbles a los que nos ven”. En el fondo están poniendo la confianza en las cualidades humanas adquiridas con nuestro esfuerzo, en los conocimientos teológicos o de pastoral. En definitiva, esa idea más o menos consciente es consecuencia de creer que la conversión, el cambio del corazón y de mentalidad es fruto de un proceso formativo bien diseñado por los “especialistas” correspondientes.

Por eso es necesario destacar hoy también como en toda la historia de la Iglesia que el cambio, la conversión, no la hacemos nosotros porque Jesús nos haya seducido, sino que la hace Él en nosotros, si le dejamos. Jesús no es un personaje fabuloso del pasado cuya vida nos cautiva y sus fantásticas enseñanzas nos hacen seguirle. Jesucristo Resucitado es contemporáneo nuestro que sale a nuestro encuentro para salvarnos, para transformarnos, para convertirnos, para ser testigos creíbles del amor misericordioso de Dios en medio del mundo. Jesucristo no quiere que seamos especialistas en su vida ni en su mensaje, Él quiere que seamos otro Cristo encarnando así su mensaje para el mundo de hoy. Esto sólo es posible por medio de la gracia, por eso la primacía en la evangelización la tiene la gracia. Por eso lo más importante es la oración, los Sacramentos, la vida interior.

Evangelizamos, no por lo que decimos o hacemos, sino por lo que somos. Evangelizaremos si somos otro Cristo. Por eso toda pastoral debe dar prioridad a la vida espiritual, a los Sacramentos, a la oración personal y comunitaria, para poder respetar este principio esencial: la primacía de la gracia.

Qué gran peligro el creernos “personitas” protagonistas de la acción evangelizadora de la Iglesia. Muy pronto empezaremos a ceder tiempo de la oración para “hacer” cosas o para “tener formación”. Sin darnos cuenta nos iremos dando más importancia a nosotros mismos, a nuestras estrategias y métodos que al mismo Cristo. Y terminamos por servir a las estructuras, a los métodos, a las dinámicas de grupos, a las encuestas, a las nuevas tecnologías y nos olvidamos que nuestro servicio tienen que ser a las personas que están esperando que alguien les presente a Cristo para que se encuentro con Él y descubra que Dios tiene un plan desde toda la eternidad para hacerle feliz.

Cuando entras en la dinámica de la verdadera conversión ya no te mueve al apostolado un compromiso adquirido libremente porque eres una “personita concienciada con una noble causa”, sino el mismo Dios que con su gracia hace posible tu nueva vida de relación íntima con Él.


Por eso querido amigo que no te falte cada mañana la oración a solas con Él, para que prolongándola durante toda la jornada no te falte la Luz para iluminar el día. Esta es, además, la única manera de ver que tus proyectos pastorales  van dando fruto en extensión y en profundidad porque, poniendo en Él la confianza, haces como San Pedro: “En tu palabra, echaré la redes”.

No hay comentarios:



¿QUIERES FORMAR UN GRUPO DE MATRIMONIOS EN TU PARROQUIA

VENI CREATOR

FIRMES EN LA FE (Himno oficial JMJ Madrid 2011)

UN SEGLAR DESCUBRE LA ORACIÓN (Abelardo de Armas Añón)

Abelardo de Armas. Un seglar descubre la oración from Cruzados de Santa María on Vimeo.

Fuente: http://abelardodearmas.blogspot.com/