PROMOCIÓN DE GRUPOS José María Ayerbe

MOVIMIENTO FAMILIAR CRISTIANO

COMO DEBE SER UN GRUPO




1.- Una comunidad humana:

Con .- unión y cordialidad.
Donde se viva.- la sinceridad y la confianza.
Donde se comparta.- preocupación y ayuda mutua.
actitudes de escucha, discreción y reserva.

2.- Una comunidad de formación:

- para trabajar en grupo.
- para estudiar y profundizar en el temario de trabajo.
- para prepararse y perfeccionarse personal y conyugalmente.
- utilizando como metodología el diálogo y el intercambio de experiencias.

3.- Una comunidad de fe:

Donde se experimentan: - la oración personal, conyugal y comunitaria.
- la reflexión sobre la Palabra.
- los valores evangélicos.
- las posibles incoherencias entre nuestro pensar
y nuestro hacer como cristianos.
- la celebración de la fe.
- el asesoramiento y apoyo mutuo.

4.- Una comunidad comprometida:

- como miembros de la Iglesia, y de la comunidad parroquial en su tarea
evangelizadora.
- como miembros de la sociedad, impregnando, como laicos, las estructuras del
mundo y buscando su transformación.
- como miembros del Movimiento Familiar Cristiano, en tareas específicas de la
familia, desde la experiencia conyugal, familiar y miembros del Movimiento.
EL GRUPO CRISTIANO


1— ¿Cono conseguir una comunidad humana?

DIFICULTADES MEDIOS

Miembros demasiado habladores Dialogo y cordialidad
Miembros demasiado tímidos Sinceridad y confianza
Miembros demasiado discutidores Preocupación y ayuda
Matrimonios con problemas Mutuo respeto y escucha
Falta de Sintonía Discreción y reserva
Algunos asisten sin interés Celebraciones y convivencias

2- ¿Cono conseguir una comunidad interesada en formarse?

DIFICULTADES MEDIOS

Falta de interés en los temas Temas de interés para todos
Niveles de formación diferentes Ritmo de trabajo adecuado
Centros de interés diferentes Exigencia de preparación temas
Diferentes edades y situaciones Participación de todos
Suficiencia o inferioridad Exigencia de compromisos
Aburrimiento o rechazo

3- ¿Como conseguir una comunidad de fe?

DIFICULTADES MEDIOS

Distintos niveles de fe Oración personal y conyugal
Actitud negativa a la religión Reflexión sobre la Palabra
Indiferencia religiosa Hacer revisión de vida
Religiosidad no compartida Compartir testimonios de vida
Dificultad para expresar la fe (Dar y recibir al grupo)
Miedo a las consecuencias Abrirse a los demás
Celebraciones eucarísticas

4- ¿Como conseguir una comunidad comprometida?

DIFICULTADES MEDIOS

El ambiente exterior no ayuda Compromisos de testimonio en
(sociedad, trabajo, familia) el trabajo, familia, sociedad
Excesivas ocupaciones Trabajo apostólico, parroquia,
(falta de tiempo) caritas, MFC, otras.
Falta de entrega Buscar una tarea para el grupo
DECÁLOGO DEL ANIMADOR
PARA LA FORMACIÓN DE UN GRUPO HUMANO



1- Antes de la reunión preparar el marco general de cada encuentro, el tema a tratar y los posibles puntos de diálogo y discusión.

2- Procurar que las personas sean capaces de descubrir y expresar sus necesidades reales; sus problemas y dificultades y las expectativas puestas en las reuniones del grupo.

3- Crear un ambiente que favorezca la participación de todos e invitar a intervenir a los que normalmente guardan silencio.

4- Aprovechar las ideas y sentimientos de los componentes del grupo y aceptar las diferencias de opinión como algo bueno y enriquecedor.

5- Procurar que todos se sientan aceptados por el grupo y se encuentren a gusto y con libertad para expresar sus opiniones. Evitar a toda costa que alguien se sienta ofendido, suavizando toda discusión o apasionamiento

6- Seguir un proceso que dé tiempo a aprender, que respete los tiempos necesarios para que todos vayan asimilando los temas.

7- Hacer del grupo un lugar de crecimiento humano y maduración personal para todos sus miembros.

8- Reconducir al grupo con prudencia y habilidad a los planteamientos iniciales si se desvía del plan previsto para la reunión.

9- Escuchar mucho y a todos, para conocer lo mejor posible la situación de cada uno; procurar no hablar demasiado y no hacerlo nunca desde una posición de suficiencia o superioridad.

10-Ir descubriendo gradualmente nuevas metas a los miembros del grupo hasta que ellos identifiquen sus metas o aspiraciones particulares con el proyecto general del propio grupo.
DECÁLOGO DEL ANIMADOR
PARA LA FORMACIÓN DE UN GRUPO CRISTIANO



1- Antes de la reunión, ponernos en la presencia de Dios y pedirle su ayuda para que nos asista y ponga sus palabras en nuestra boca.

2- Sentirnos y actuar como servidores del grupo, estando a su disposición, recordando las palabras del Señor, "El primero entre vosotros, pórtese como el menor y el que gobierne como el que sirve". (Le, 22, 26)

3- Al comenzar la reunión, hacer presentes las palabras del Señor, "Cuando dos o más están reunidos en mi nombre, allí en medio de ellos estoy Yo". (Mt, 18,20)

4- No desanimarnos nunca ni esperar frutos inmediatos. Recordar las palabras, "Uno es el que siembra y otro es el que siega" (Jn 4, 17)

5- Intentar hacer del grupo una expresión de fraternidad, una pequeña comunidad cristiana de hermanos en la fe, en la que tengan lugar: el amor, el espíritu de servicio, la corrección fraterna y el perdón.

6- Evitar a toda costa el “capillismo”, haciendo continuas referencias a la Iglesia como comunidad de todos los cristianos, de la que formamos parte.

7- Hacer del grupo un lugar de crecimiento y maduración de la fe, descubriendo los valores evangélicos por medio de la lectura y la reflexión sobre la palabra de Dios.

8- Facilitar al grupo una formación que desarrolle sus valores humanos, les haga comportarse ética y cristianamente en las situaciones ordinarias de la vida y descubran la exigencia del compromiso cristiano en una vida coherente con la fe.

9- Ofrecer al grupo, con sencillez, nuestro propio testimonio cristiano, en nuestra vida matrimonial, familiar y profesional y como miembros de la sociedad y de la iglesia

10- Hacer que, gradualmente, todos los miembros decidan un proyecto común para el grupo; bien como grupo parroquial o como miembros del Movimiento Familiar Cristiano.
MOVIMIENTO FAMILIAR CRISTIANO

NOTAS SOBRE EL FUNCIONAMIENTO DE UN GRUPO



1.- Reunión:
.- Dónde: Locales parroquiales .Casas de los miembros . Variable
.-Periodicidad: Óptima; cada 15 días.

Es importante fijar: -hora de comienzo
-hora de terminación

.- Para la reunión:
- Previamente: 1.- Reflexión personal del tema que se ha elegido.
2.- Diálogo conyugal e intercambio de ideas.
(conviene llegar a una síntesis que impida la improvisación
- En la reunión: 3.- Puesta en común en el Grupo.
.- Duración: Óptima, de 1,30 a 2 hora
- repartiendo el tiempo de acuerdo con los cinco momentos (abajo)
.- Número de miembros: Óptimo de 5 a 7 matrimonios. No más.
Un matrimonio hace de enlace o coordinador.
Un miembro singular es el Consiliario
Si el grupo está en formación puede tener además, un Matrimonio Animador
Nota: es preferible no tomar nada durante la reunión.

2.- Momentos de la Reunión:
1.- ORACIÓN -que haga presente al Señor en el Grupo.
2.- LECTURA DE LA PALABRA
Un texto seguido o textos de la Misa del Domingo posterior o anterior.
- Comentarios a la Palabra de los miembros del Grupo:
Respondiendo a: "¿qué es lo que me dice o me pide a mi vida personal la Palabra
que he leido?"
Nota: Evitar entrar en discusiones semánticas o exegéticas, o rebatir las
interpretaciones de los demás, (si fuera necesario se aplaza este tipo de análisis
para la próxima reunión, previa consulta y documentación)
3.- Desarrollo de TEMA:
- Anunciado en la reunión anterior.
- Preparado personal y conyugalmente (con algunas notas por escrito)
- Tomado del: Libro, Documento, Ideario, Guión elegido por el Grupo.
- Con intervención de todos los componentes del Grupo, por turno. (no importa que las intervenciones se repitan. Siempre los matices personales
son enriquecedores) Estimular la intervención de todos.
4.- Tratar de buscar un COMPROMISO, personal o del Grupo.
5.- ORACIÓN: De agradecimiento al Señor por la labor realizada en el Grupo.
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Nota: Al final de cada curso, hacer una revisión de la marcha del Grupo
Nota: Periódicamente y según lo vaya pidiendo el Grupo pueden tenerse reuniones dedicadas sólo a: Oración .- Eucaristía.- Específicas del tiempo litúrgico.- Convivencias y salidas al campo.- Reuniones de intercambio con otros Grupos, preparadas por ambos.
3.- El Matrimonio Enlace.
Es un matrimonio del Grupo que es encargado, por delegación de los demás
como "animador y motivador" del Grupo, como:
* comunidad humana
* comunidad de formación
* comunidad de fe
*comunidad comprometida
- Recuerda las convocatorias de las reuniones
- Recuerda los temas a tratar
- Recuerda los compromisos adquiridos
- Hace resumen de las reuniones: horarios, fechas, temas, compromisos...
- Aglutina iniciativas
- Facilita la participación de todos en las reuniones
- Pone en conexión a unos con otros
- Se relaciona con los Enlaces de otros Grupos
- Asiste a las reuniones de Enlaces
- Conecta con los Presidentes Diocesanos y facilita datos, transmite noticias
y directrices comunes, etc...

4.- El Consiliario
- Es un miembros más del Grupo participando plenamente en la vida del mismo.
- Ilumina desde su experiencia pastoral y conocimientos.
- Ayuda a transformar el Grupo en Iglesia
- Facilita la organización y desarrollo de la Oración, Eucaristía, etc...
- Ayuda a tomar compromisos y estimula siempre.
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Situaciones a evitar:
*Que no se respete la intimidad del Grupo. Las expresiones, confidencias, dificultades que puedan testimoniarse en el Grupo no deben salir de él.
*Que algunos miembros del Grupo copen habitualmente el diálogo.
*Que se reparta mal el tiempo que dura la reunión, de forma que se dé demasiado tiempo a uno sólo de los momentos de la reunión.
*Que se prolonguen indefinidamente las reuniones, sin respeto a los que no pueden seguir ese horario.
*Que se empiece o termine con retraso.
*Que se tenga demasiada dependencia del Consiliario.
*Que el Enlace sea absorbente o que los demás relajen su responsabilidad en él.
*Que se llegue a "discusiones" que dificulten el diálogo o las relaciones entre los miembros del Grupo; o que se divague saliéndose del tema, por no llevarlo preparado.
*Que algunos quieran ir demasiado deprisa (o demasiado lento) sin respetar los ritmos de los demás.
*Que no se participe activamente en el Grupo por creer que no tiene nada que decir; que ya se ha dicho todo; que los demás son más capaces que uno; que lo que decimos no tiene importancia; etc...
*Que sólo se pretenda "recibir" del Grupo sin entender que el enriquecimiento personal y colectivo está en la actitud de "dar".
*Que la reunión termine con la reunión y no trascienda posteriormente a la vida conyugal y personal, (diálogo, comunicación, compromiso,...) familiar y de relaciones sociales y profesionales.
*Que se improvise todo y siempre. No preparar las cosas no ayuda a adquirir criterios objetivos ni compromisos estables, progresivos y satisfactorios. Esto siempre produce insatisfacción.
*Que se tome la reunión solo como un "aula" para adquisición de conocimientos y no como un medio de reflexión y profundización en nuestra experiencia de fe y de vida familiar, que nos abra, enriquezca y dinamice.
*Que el Grupo se transforme sólo en una reunión de amigos.
*Que el Grupo no vaya descubriendo alguna tarea común en la que comprometerse.
*Que el grupo se vaya cerrando y dé la impresión de "gueto".

José María Ayerbe