En busca de la santidad
martes, 24 de abril de 2012
LA RESURRECCIÓN NO ES UNA EXPERIENCIA PSICOLÓGICA
ES UN ACONTECIMIENTO REAL DE ENCUENTRO CON JESUCRISTO RESUCITADO
La Resurrección no fue una experiencia psicológica, fue y es un acontecimiento real de encuentro con Jesucristo Resucitado.
Nuestros amigos de Emaus cuando iban desorientados por el camino no experimentaron un “proceso psicológico ni una maduración intelectual y moral”. No ardía su corazón “fruto de un pensamiento, sino de un encuentro real con Jesucristo” que se hizo presente ante ellos.
Con San Pablo funciona de la misma manera, “Cristo Resucitado se le hace presente y habla a Saulo, transforma su pensamiento y su misma vida”. "Todos los análisis psicológicos no pueden aclarar ni resolver el problema. Solo el acontecimiento, el encuentro fuerte (de San Pablo) con Cristo, es la llave para entender qué había sucedido: muerte y resurrección, renovación por parte de Aquél que se había revelado y había hablado con él”.
“Pasemos ahora a nuestra situación, ¿qué quiere decir esto para nosotros? Quiere decir que también para nosotros el cristianismo no es una filosofía nueva o una nueva moral. Sólo somos cristianos si encontramos a Cristo. Ciertamente Él no se muestra a nosotros de esa forma irresistible, luminosa, como lo hizo con Pablo para hacerle Apóstol de todas las gentes. Pero también nosotros podemos encontrar a Cristo, en la lectura de la Sagrada Escritura, en la oración, en la vida litúrgica de la Iglesia. Podemos tocar el corazón de Cristo y sentir que Él toca el nuestro.
Sólo en esta relación personal con Cristo, sólo en este encuentro con el Resucitado nos convertimos realmente en cristianos. Y así se abre nuestra razón, se abre toda la sabiduría de Cristo y toda la riqueza de la verdad. Por tanto oremos al Señor para que nos ilumine, para que nos conceda en nuestro mundo el encuentro con su presencia: y así nos dé una fe viva, un corazón abierto, una gran caridad para todos, capaz de renovar al mundo.”
sábado, 14 de abril de 2012
A LA LUZ DE SU MIRADA


¿Con rezar es suficiente?

Detrás de cada historia de conversión está el Espíritu Santo..., y un amigo o un familiar que ha vencido los respetos humanos para invitar a un retiro, o bien a unas catequesis, a un grupo de oración, o simplemente prestando un libro para conocer mejor a Jesucristo. Todo porque, como afirmaba el Papa Benedicto XVI en su último Mensaje de Cuaresma, «el otro me pertenece; su vida y su salvación tienen que ver con mi vida y mi salvación»

No lo dudaríamos a la hora de socorrer a algún herido en la carretera, pero nos tiemblan las piernas cuando tenemos que hablar de Dios a algún amigo o familiar. Muchas veces dudamos: ¿de verdad tenemos que hablar de Dios a los demás? ¿No bastaría con rezar por ellos, y después Dios sabrá cómo llamarlos? Pero, si yo no sé apenas hablar, ¿cómo voy a hablar de Cristo a mi padre, a mi hermano, a mi amiga, a mi novio...? Eso de evangelizar, ¿no es más bien cosa de curas?
En realidad, todo depende de cómo sea nuestra relación con el Señor. Si Él es, de verdad, para nosotros la Luz y la Vida, ¿cómo vamos a
dejar que los demás sigan ciegos o experimenten la muerte que trae consigo el pecado? Nos tendría que doler de verdad que las personas más cercanas a nosotros puedan vivir sin conocer a Jesucristo. Muchos viven sin noticias de Dios porque nosotros no les hemos hablado de Él. Todo depende de la fe que tengamos, porque de lo que abunda el corazón habla la boca. Y si nuestro corazón abunda en Cristo, hablaremos de Cristo.
No basta sólo con rezar. Monseñor Rino Fisichella, Presidente del Consejo Pontificio para la Nueva Evangelización, declaró recientemente que no se puede prescindir del anuncio: «¡Basta! Tenemos que hablar un poquito». Pablo VI, en la Exhortación apostólica Evangelii nuntiandi, señala la necesidad de un anuncio explícito: «El más hermoso testimonio se revelará a la larga impotente, si no es explicitado por un anuncio claro e inequívoco del Señor Jesús».
http://www.alfayomega.es/Revista/2012/781/01_enportada1.php



¿QUIERES FORMAR UN GRUPO DE MATRIMONIOS EN TU PARROQUIA
VENI CREATOR
FIRMES EN LA FE (Himno oficial JMJ Madrid 2011)
UN SEGLAR DESCUBRE LA ORACIÓN (Abelardo de Armas Añón)
Abelardo de Armas. Un seglar descubre la oración from Cruzados de Santa María on Vimeo.
Fuente: http://abelardodearmas.blogspot.com/